Una soldadora de aire caliente utiliza calor, velocidad y presión muy precisos para unir tejidos y films industriales termoplásticos. La combinación correcta de estos tres parámetros consigue una soldadura completa en una aplicación. El proceso de soldadura por aire caliente comprime y sopla aire a través de elementos térmicos eléctricos para aplicar e inyectar ese calor en el punto de soldadura. La temperatura, rigurosamente controlada, oscila entre 400°C y 730°C (700°F y 1.350°F).
¿Es la soldadura por aire caliente adecuada para mi aplicación?
Para garantizar que nuestros clientes dispongan del mejor sistema de calor para su aplicación, lo mejor es hablar con un experto de Miller Weldmaster . Aunque el aire caliente, la cuña caliente, el impulso y la RF funcionan para muchas aplicaciones, uno puede funcionar mejor que otro dependiendo de la aplicación. Miller Weldmaster le ayudará a seleccionar la mejor tecnología para su aplicación.
Por qué elegir la soldadura por aire caliente
- Construir un producto con diferentes formas y curvas
- Produciendo una gama versátil de productos
- Crear costuras más resistentes que el propio material para diversos trabajos de fabricación
- Cree costuras herméticas e impermeables a diferencia de cuando coses y haces agujeros en el tejido
- Cambio frecuente de la anchura de soldadura a lo largo del proceso de fabricación
- Utilizando varios cabezales de soldadura simultáneamente
- Arrancar y parar con frecuencia durante todo el proceso de soldadura
Si no encuentra su tejido en esta lista, póngase en contacto con nosotros y explíquenos sus necesidades de soldadura de tejidos.